Familia adoptiva

Familia que decide adoptar a un niño, niña o adolescente, asemejándolo legalmente a un hijo o hija biológico/a.
Las familias adoptivas surgen como respuesta de las sociedades humanas ante el hecho de las condiciones de desprotección en las que nacen muchos niños/as cuyos padres y madres no pueden, por diversas causas, responder adecuadamente a las necesidades de estimulación, recursos, disponibilidad, etc., que un ser humano en desarrollo requiere.

Por tanto, la ausencia de vínculos genéticos entre progenitores e hijos/as es una de las peculiaridades de estas familias. Además, al ser adopción un proceso legal, estas familias están seleccionadas desde el punto de vista de su capacidad para proveer de un contexto global que garantice un desarrollo adecuado de los/as niños, niñas y adolescentes; estos padres y estas madres muestran habitualmente una alta motivación hacia la crianza de sus hijos/as.

Un reto específico que deben afrontar estas familias, al igual que las familias que recurren a la reproducción asistida con donante anónimo, es informar al niño/a de sus orígenes y del hecho de que es hijo/a biológico/a de otras personas que no son los/las que conviven con él o con ella; este proceso se denomina revelación y su gestión adecuada contribuye al desarrollo idóneo del sentimiento de identidad.

Las crisis en las familias adoptivas:

Los hijos e hijas adoptados/as pueden haber sufrido algún tipo de privación por provenir de una institución o de un entorno familiar disfuncional o de contextos muy vulnerables.
Puede existir una gran variabilidad en cuanto a las situaciones de dificultan que presenten las personas adoptadas en función de la edad en la que se produce la adopción, el historial del niño/a o adolescente previo a la misma, el nivel de desarrollo que presenta cada menor o la posibilidad de que padezca algún tipo de retraso o enfermedad.
Expectativas previas o idealización de la adopción por parte de la familia adoptiva.
Los y las menores desconocen que son adoptados/as y se enteran de forma abrupta.
El momento en el que los hijos e hijas adoptados/as quieran saber de sus orígenes.
Posibilidad de que los/as hijos/as adoptados/as dispongan de información acerca de sus orígenes y les suponga una crisis existencial y personal o lleguen a conocer a su familia de origen.
Sufrir situaciones de discriminación por ser personas adoptadas.
Dificultades legales que generen malestar en la familia adoptante.
Puede haber miembros de la familia biparental y extensa que no acepten a los y las menores adoptados/as.

Parentalidad Positiva en las familias adoptivas:

Algunos criterios educativos a tener en cuenta en el modelo de familias adoptivas serían:

Hablar de su adopción con naturalidad y de forma adecuada a la edad y capacidades que posea el niño, la niña o adolescente.
Evitar reproches y prejuicios relativos a la familia de origen.
Facilitar el sentimiento de pertenencia a la familia, que el niño, niña o adolescente sienta que su familia adoptiva se mantendrá a su lado incondicionalmente.
Evitar la sobreprotección de los y las menores.
Mantener contacto y asociarse con familias que han vivido una situación similar a la propia.
Si el niño, niña o adolescente adoptado/a es de otro país de origen, ayudarle a enfrentar las situaciones de posible discriminación sin que se sienta amenazado/a personalmente y fomentando la aceptación de la multiculturalidad y diversidad de las personas.