Las conductas de riesgo son comportamientos voluntarios o involuntarios que pueden conllevar peligro para la persona o su entorno produciendo sensaciones placenteras inmediatas. Estas conductas se manifiestan de modo más frecuente e intenso en la adolescencia y pueden llegar a afectar a la salud biopsicosocial y al bienestar e instaurarse de manera permanente en la etapa adulta con las consecuencias de mortalidad y morbilidad que implican.
Por ello es importante prevenirlas, promoviendo factores de protección en niños y niñas desde etapas tempranas para atravesar la adolescencia en las mejores condiciones y con las mayores fortalezas para no desarrollar conductas problemáticas con consecuencias negativas.
Para lograrlo, UNAF ofrece talleres gratuitos donde se proporcionan pautas y orientación a las familias, potenciando las capacidades de todo el sistema familiar y fomentando una parentalidad positiva.
Este programa cuenta con el apoyo del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.