- Madres solteras, migrantes o sordas se enfrentan a numerosos obstáculos que las sitúan en riesgo de exclusión social.
- Diversas entidades sociales compartieron buenas prácticas en la atención a la maternidad en riesgo pero solicitan un mayor apoyo institucional
Madrid, 30 de octubre de 2018. La Unión de Asociaciones Familiares (UNAF) y la Asociación Salud y Familia celebraron el 30 de octubre en CaixaForum Madrid una jornada dedicada a visibilizar las ‘Maternidades Vulnerables’, las de aquellas mujeres que lo tienen más difícil a la hora de criar a sus hijos e hijas por diferentes circunstancias y que impiden que estos puedan desarrollarse adecuadamente y en igualdad de oportunidades.
Pobreza, migración, discapacidad, maternidad adolescente, falta de apoyo familiar o de pareja, alcoholismo u otras adicciones… son algunas de esas situaciones que requieren un especial apoyo para que esa maternidad pueda salir adelante: “Los poderes públicos deben conocer estas realidades y prestar apoyo a estas mujeres que se enfrentan al reto de la maternidad con muchas dificultades, poniéndolas en riesgo de exclusión social ya no solo a ellas sino también a sus hijas e hijos. Debemos garantizar que esos niños y niñas tengan las condiciones para poder desarrollarse y tener una vida digna”, afirmó Ascensión Iglesias, presidenta de UNAF.
Desde la premisa de que “no existe una unidad de estilo en la maternidad”, Elvira Méndez, Directora de la Asociación Salud y Familia, defendió la atención a las mujeres desde un enfoque pro-elección, es decir, apoyando su libre decisión respecto a la continuidad o no de su embarazo. «La maternidad no es un automatismo biológico, es el efecto de una mujer que da el sí». Por eso, en sus diferentes servicios de apoyo a madres adolescentes, jóvenes y migrantes, la entidad ayuda a las mujeres a tomar su decisión y les orientan sobre ayudas públicas, itinerarios formativos, búsqueda de trabajo, a la obtención de la tarjeta sanitaria, contracepción inmediata gratuita o planificación familiar.
La vulnerabilidad de la maternidad puede producirse a partir de una situación de migración, tal como explicó Gregorio Gullón, responsable del Servicio de Mediación entre Madres y Padres y sus hijos o hijas adolescentes de UNAF. “Las familias migrantes que se separan y se reagrupan posteriormente se enfrentan a fronteras ambiguas, donde no se sabe bien quién está fuera o dentro de ellas. Es necesario acompañarlas en ese proceso y ayudarlas a aclarar esa confusión”.
Otra maternidad vulnerable es la de las madres sordas, que “presentan una doble vulnerabilidad: por las barreras de comunicación – con la consiguiente desinformación, dificultad de acceso a servicios y recursos – y por la desigualdad – por la infravaloración de sus capacidades”, tal como señaló Laura Hernando, psicóloga y técnica del Área de Investigación y Materiales en Lengua de Signos Española de la Confederación Estatal de Personas Sordas. Por ello, reclamó recursos tecnológicos y profesionales de apoyo a la maternidad, como avisadores visuales o vibratorios para detectar el llanto del bebé así como el apoyo de personas mediadoras.
Carmen Flores, Presidenta de la Federación de Asociaciones de Madres Solteras, destacó que cerca de 2 millones de familias en España son monoparentales, de las cuales el 81% están encabezadas por mujeres. “Más de la mitad de las familias monomarentales no tiene trabajo y el 56% vive con menos de 600 euros al mes, lo que dificulta su acceso a cuestiones básicas como la vivienda”. Por ello, desde su entidad ofrecen servicios y recursos gratuitos de orientación socio-laboral, de formación, vivienda, conciliación, ocio… al tiempo que solicitan una ley de familias monoparentales para atender sus necesidades específicas.
Por su parte, Arantxa Díez, Coordinadora del Programa Preinfant Madrid de la Asociación Bienestar y Desarrollo, habló de este programa de acompañamiento a la maternidad desde la etapa prenatal, cuyo objetivo es la prevención del maltrato infantil y con el que dan soporte a las madres protegiendo la salud física y mental del bebé, disminuyendo o eliminando las situaciones de riesgo que se puedan dar durante el embarazo y durante los tres primeros años de vida en un contexto familiar de alta vulnerabilidad. “El 85% de las madres atendidas ha mejorado sus habilidades en la crianza y ha adquirido un vínculo materno seguro”, señala.
La jornada, que contó con el apoyo del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y la Obra Social «La Caixa», fue clausurada por Ana Buñuel, Directora General de Familia e Infancia del Ayuntamiento de Madrid, quien concluyó que “debemos poner la mirada en las mujeres vulnerables, y sobre todo, en las niñas, niños y adolescentes, protegiendo el interés superior de las y los menores”.
