En el marco del Día Europeo de la Mediación
- El promedio de años de convivencia de las parejas en proceso de ruptura que llegan al Servicio de Mediación Familiar en la actualidad es de 13 años
- Las tres principales razones por la que rompen las parejas son: “los problemas de comunicación”, “las diferencias en la forma de entender o ver la vida” y los problemas derivados de la “ausencia de demostraciones afectivas”
- La mediación familiar tiene un impacto positivo y pacificador en los conflictos, reduce costes económicos y de tiempo (6-9 semanas) a la hora de poner en marcha el proceso de separación
- Las mujeres son, en la mayoría de los casos, las primeras en tomar la iniciativa tanto en la mediación como en la petición individual de divorcio (27% de mujeres frente a 16% de hombres).
La Unión de Asociaciones Familiares, organización pionera de la mediación en España, quiere reivindicar un año más la declaración del 21 de enero como Día Europeo de la Mediación. Con el fin de evidenciar la necesidad de dar visibilidad y poner en valor esta vía de resolución de conflictos en España, ha elaborado un estudio en el que analiza los ‘Logros y enseñanzas de los 25 años del Programa de Mediación Familiar de UNAF’. Además, este análisis de la mediación ha ayudado a mostrar la evolución de las familias en este periodo de tiempo en nuestro país.
A principio de la década de los 90 prevalecía en la sociedad española un modelo de familia tradicional de tipo autoritario y jerarquizado que podían conducir a dirimir en algunos casos los conflictos de forma violenta. Las rupturas matrimoniales tendían a generar conflicto y a ser resueltas de manera contenciosa, destaca el informe.
A estas bases culturales se unía el desconocimiento general de la mediación como recurso para gestionar de manera dialogada, equilibrada y pacífica, las rupturas matrimoniales y de pareja. «Afortunadamente, en estos 25 años ha cambiado mucho el panorama familiar. Sin embargo, la mediación todavía no es suficientemente conocida por la ciudadanía. Es necesario un mayor impulso a la difusión y sensibilización sobre esta vía alternativa de resolver los conflictos sin necesidad de intervención judicial, sobre todo a nivel institucional», señala Ascensión Iglesias, presidenta de UNAF.
Las mujeres toman la iniciativa
Atendiendo a la distribución por sexo de las llamadas telefónicas que solicitan información, desde UNAF se observa que quienes dan este primer paso suelen ser mayoritariamente las mujeres, aunque a partir de mediados del 2000 se manifiesta un repunte en el número de hombres.
Según los datos proporcionados por el INE, en 2014 se solicitaron en nuestro país 99.882 divorcios, la mayoría de mutuo acuerdo entre las parejas (56,4%), si bien el 27,6% de las solicitudes de divorcio individuales fueron realizadas por mujeres, frente al 16% que fueron solicitadas por hombres. Por lo que se refiere a las separaciones, las cifras fueron similares: de las algo más de 5.000 solicitudes de separación formuladas en 2014, la mayoría fueron formuladas conjuntamente (64,9%) si bien las solicitudes individuales fueron realizadas en mayor medida por mujeres que por hombres (25,8% y 9,4% respectivamente).
En el servicio de mediación familiar, se observa una clara evolución en las últimas décadas en lo concerniente a las personas que asisten a la primera visita: mientras que durante los primeros años del servicio eran fundamentalmente las mujeres solas las que acudían a la primera cita, con el paso del tiempo se han involucrado mayoritariamente (más del 80% en algunos años) ambos miembros de la pareja en este proceso.
Los matrimonios decrecen
La evolución en el modelo de unión de las parejas atendidas viene a ser un reflejo de los cambios de las familias españolas en las tres últimas décadas. El matrimonio ha perdido peso como vía de formación de las parejas. Asimismo, se ha producido un rápido proceso de secularización en el matrimonio, de manera que se ha registrado una drástica reducción del número de matrimonios canónicos. Si bien en 1980 la práctica totalidad de matrimonios eran religiosos (el 95,5%), en 2012 ese porcentaje había descendido hasta el 37% del total de matrimonios.
El promedio de años de convivencia de las parejas en proceso de ruptura que llegan al Servicio de Mediación Familiar es de 13 años, siendo las más habituales las parejas con una duración media de su convivencia de entre 10 y 20 años. Esto guarda una relación directa con los datos del INE para la población general, según los cuales la duración media de los matrimonios disueltos en 2014 fue de 15,8 años.
¿Por qué terminan los matrimonios?
El estudio de UNAF resume en tres los principales motivos de las rupturas de relaciones entre los miembros de la pareja según señalan las personas que acuden al Servicio de Medicación Familiar. Con carácter general, en las dos últimas décadas han prevalecido tres motivaciones básicas en los procesos de separación: “los problemas de comunicación entre los miembros de la pareja”, “las diferencias en la forma de entender o ver la vida” y los problemas derivados de la “ausencia de demostraciones afectivas”.
Un cuarto motivo recurrente, aunque con menor peso, ha sido que “el otro miembro de la pareja se quiere separar”, es decir, que la persona que contestaba a la encuesta alegaba que la decisión de separarse no era propia sino de la otra parte. Entre estos cuatro motivos se han articulado generalmente en torno al 50-60% de las respuestas acerca de los orígenes de la ruptura, dependiendo del año analizado.
La mediación, impacto positivo y pacificador
La mediación disminuye la conflictividad en el conjunto de la familia. La mediación permite salvaguardar el bienestar de los hijos, proteger sus intereses y respetar sus derechos; y también empodera a los miembros de la pareja, permitiendo que cada persona se libere de la culpa y asuma un rol activo.
Otro valor añadido del Servicio de Medicación Familiar de UNAF para una familia es la reducción de costes económicos y de los tiempos de resolución de los conflictos: resolver una ruptura a través de la mediación suele ser un proceso más corto (de media entre 6 y 9 semanas), y menos costoso ya que mediación de UNAF es gratuita.
Por extensión, el Servicio de Mediación Familiar tiene impactos beneficiosos en el conjunto de la sociedad porque la mediación contribuye a la prevención de los conflictos, a una disminución de la conflictividad desde el seno mismo de las familias, la principal institución social, y a la promoción de una cultura democrática y del diálogo en la sociedad.
Nuevas formas familiares, nuevos retos para la mediación
Para Manahem Moya, mediador del Servicio de Mediación Familiar de UNAF, “el incremento de la diversidad cultural, de las rupturas conyugales, de las familias monoparentales y de la diversidad de formas de convivencia y de modelos familiares dibuja una nueva realidad que debe considerarse en todo el trabajo que se realice en este ámbito, y por tanto requiere de una gestión flexible y no uniforme en el tratamiento de estas situaciones específicas por parte de la persona mediadora. Asimismo, surgen nuevos conflictos intergeneracionales, y posibilidades de mediar en situaciones vinculadas a las relaciones fraternas, a las relaciones entre familias biológicas y de adopción, y en el caso de los mayores en situación de dependencia”.